Plan
de China volver los desiertos más verdes y Lluviosos
Es
posible que el cambio climático se convierta en uno de los grandes retos a los
que debe enfrentarse la humanidad en este siglo. Ante este reto, la ciencia
debe conformar la base sobre la cual sustentar las decisiones políticas encaminadas
a la mitigación y a la adaptación. Y esa ciencia del cambio climático puede, de
una forma bastante simple, resumirse en tres grandes líneas de investigación íntimamente
relacionadas. La primera hace referencia al tiempo actual y persigue la
detección y caracterización del cambio y su repercusión en los recursos
naturales y en los sistemas sociales. La segunda se centra en la predicción,
fundamentalmente a medio plazo, y se basa en modelos matemáticos que persiguen
la ardua tarea de modelar el sistema climático y de generar simulaciones
fiables del clima futuro a escala global, y la Tercera se refiere al pasado: se
centra en el análisis de la variabilidad climática, en la deducción de los
factores que la han determinado y en la reconstrucción de su influencia en los
sistemas naturales y en la historia de la humanidad.
Figura
N° 1: ilustración sobre el cambio climático
Barreras
Ecológicas en el Desierto
En
la actualidad no escapamos de los problemas que están relacionados con el
cambio climático, debido al desarrollo descontrolado a nivel mundial, por ejemplo,
china es uno de los mas grandes emisores de carbono a la atmosfera, pero este
país asiático está llevando a cabo grandes esfuerzos para contrarrestar el daño
que se le esta haciendo al planeta, el proyecto consiste en un desierto
ecológico en el desierto de Kabuki.
China
esta intentando controlar este desierto de forma definitiva, ya que este
desierto es el acusante de muchas muertes en la ciudad de Beijing, debido a que
cada cierto tiempo las tormentas de arena azotan a la ciudad contribuyendo a
aumentar los niveles de contaminación.
Este
problema tiene una de sus causas al norte de la urbe, en el desierto de Kabuki,
uno de los siete más grandes de China, ubicado en la Región Autónoma de
Mongolia Interior. Cubre alrededor de 18 mil kilómetros cuadrados y lentamente,
impulsado por el cambio climático, avanza al sur, desertificando nuevos
territorios y amenazando a la capital. Esto ha llevado a la deforestación de
extensas áreas, y muchos pobladores empobrecidos se han visto obligados a
emigrar a causa de las malas cosechas y la muerte de sus animales.
Barreras
Ecológicas en el Desierto
En
la actualidad no escapamos de los problemas que están relacionados con el
cambio climático, debido al desarrollo descontrolado a nivel mundial, por ejemplo,
china es uno de los mas grandes emisores de carbono a la atmosfera, pero este
país asiático está llevando a cabo grandes esfuerzos para contrarrestar el daño
que se le esta haciendo al planeta, el proyecto consiste en un desierto
ecológico en el desierto de Kabuki.
China
esta intentando controlar este desierto de forma definitiva, ya que este
desierto es el acusante de muchas muertes en la ciudad de Beijing, debido a que
cada cierto tiempo las tormentas de arena azotan a la ciudad contribuyendo a
aumentar los niveles de contaminación.
Este
problema tiene una de sus causas al norte de la urbe, en el desierto de Kabuki,
uno de los siete más grandes de China, ubicado en la Región Autónoma de
Mongolia Interior. Cubre alrededor de 18 mil kilómetros cuadrados y lentamente,
impulsado por el cambio climático, avanza al sur, desertificando nuevos
territorios y amenazando a la capital. Esto ha llevado a la deforestación de
extensas áreas, y muchos pobladores empobrecidos se han visto obligados a
emigrar a causa de las malas cosechas y la muerte de sus animales.
Figura N° 2:
Desierto de Kubuqi
China
como opción a resolver el problema del desierto, específicamente la empresa Elion
Resources Group la cual comenzó a ofrecer bonos no solo por plantar arboles
sino por mantenerlos vivos de un año a otro, y encontraron que los sauces eran
el ejemplar perfecto porque requieren poca lluvia para crecer, crearon un
sistema de plantación a partir de chorros de agua. Por último y para sacar
provecho comercial del proyecto, se alentó a los pobladores a plantar regaliz,
el que también requiere de poca agua, y es muy popular en la medicina
tradicional china, la que representa la cuarta parte de la industria
farmacéutica del país.
Dicha
labor ha logrado ganar una gran cantidad de área del desierto en
aproximadamente 6,250 km2 lo cual ha sobrepasado las expectativas
que se plantearon al inicio del proyecto.
Figura
3: imagen del desierto de Kubuqi reforestada
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